
Experiencia Erasmus en Francia
Hola soy Julia, os escribo para contaros cómo está siendo mi semestre Erasmus en Lyon.
Antes de venirme a este país, no tenía prácticamente ningún interés en especial por esta zona, ahora llevo 6 meses aquí y me entristece pensar que pronto tendré que abandonarla.
Mi vida de estudiante en Lyon
Los primeros días fueron duros, apenas sabía pronunciar 10 palabras en francés, y lo peor, los franceses hablan a tal velocidad que al principio parece que al principio entenderles parecía misión imposible, cosa que hacía más complicada nuestra comunicación… ¡Ahora podemos mantener una conversación!
Aunque cuesta, poco a poco consigues adaptarte tanto al idioma, como al frío, la lluvia… Y al saborcito agridulce de la «independencia».
Aquí las clases del curso son en inglés, por lo tanto imaginaos, si ya no era fácil estudiar mi carrera en inglés, el asunto se complica cuando los profesores son franceses y pronuncian el inglés con esa vocalización tan cerrada que los caracteriza. Pero bueno, tengo la suerte de informaros ¡que lo hemos logrado!
Cultura, gente y experiencias
En cuanto a la gente, esto es otra historia. Vives en un ambiente multicultural, conoces gente de diferentes países, diferente cultura y muy distinta forma de pensar y eso refresca tu mente en enormes cantidades.
Todo el mundo cree que irse de Erasmus es fiesta. Lo confieso, es una auténtica experiencia; pero también advierto que no os faltarán días de bajón máximo en el que echaréis en falta a los vuestros. En cambio os acercará muchísimo a esas personas, por no decir, familia en la que se han convertido vuestros compañeros de viaje.
La familia de Erasmus
Os lo prometo, os animo a que no os lo penséis dos veces, si dudáis, decantaros por un «SÍ ¡como la copa de un pino!», esto es una experiencia única, tener la posibilidad de vivir otro mundo, de conocer gente nueva y maravillosa que te va a acompañar en lo bueno y en lo no tan bueno.
Una familia con la que vais a reíros al recordar las anécdotas del primer día al llegar y de las de cada día de este gran viaje, personas con los que compartiréis toda clase de experiencias, toda esta magnífica oportunidad, personas de las que aprenderéis tantísimas cosas, y de las cuáles no querréis deshaceros nunca jamás.
Postdata: Una Erasmus feliz.