Reflexión del jueves, 13 de mayo
EVANGELIO
Lectura del santo evangelio según san Juan 16,16-20
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«Dentro de poco ya no me veréis, pero dentro de otro poco me volveréis a ver».
Comentaron entonces algunos discípulos:
«¿Qué significa eso de “dentro de poco ya no me veréis, pero dentro de otro poco me volveréis a ver”, y eso de “me voy al Padre”?».
Y se preguntaban:
«¿Qué significa ese “poco”? No entendemos lo que dice».
Comprendió Jesús que querían preguntarle y les dijo:
«¿Estáis discutiendo de eso que os he dicho: “Dentro de poco ya no me veréis, y dentro de otro poco me volveréis a ver”? En verdad, en verdad os digo: vosotros lloraréis y os lamentaréis, mientras el mundo estará alegre; vosotros estaréis tristes, pero vuestra tristeza se convertirá en alegría».
Palabra del Señor
COMENTARIO:
Hay personas que son capaces de ver más allá de lo que se puede tocar y que descubren signos de esperanza, de vida, de presencia de Dios, allí donde otros sólo son capaces de ver oscuridad y desesperanza. Más aún, hay personas que son capaces de crear espacios de luz, de vida y esperanza, allá donde no hay más que oscuridad y muerte. Son personas que tienen la luz, el amor de Dios, dentro de sus corazones y por eso ven lo que otros no vemos. Ellos son capaces de iluminar, de vivir en la alegría. Ven a Jesús recorriendo nuestros caminos, caminando con nosotros, sienten su presencia en los pobres, en los tristes, en los que viven en la desesperanza. Y su presencia y su forma de comportarse lleva luz y esperanza a todos.
Vamos a pedir a Jesús en este día que nos dé esa otra forma de ver, que nos ilumine por dentro para que descubramos su presencia cerca de nosotros, para que seamos capaces de alumbrar la esperanza en nuestros corazones y la comuniquemos a los que nos encontremos a lo largo del camino. No vemos a Jesús físicamente, pero si abrimos los ojos, lo vamos a encontrar a nuestro lado, porque él no nos deja de su mano. Y la alegría que nos llenará se hará contagiosa. Y seremos luz para los que nos rodean. .
ORACIÓN
Señor Dios nuestro:
Cuando sufrimos profundamente
tendemos a clamar:
“Dios mío, ¿dónde estás?”
Danos a nosotros, como a pueblo que cree
que tu Hijo murió por nosotros
y por tu poder resucitó de entre los muertos,
una fe suficientemente profunda y firme
para comprender que tú estás con nosotros
incluso en las dificultades y aflicciones de la vida,
y hasta en la misma muerte.
Danos esta fe por medio de Jesucristo nuestro Señor.
REFLEXIÓN:
Se puede “ver” de muchas maneras. Hay quien a pesar de tener abiertos los ojos no ve ni entiende nada. Y hay quien hasta con los ojos cerrados lo ve y lo entiende todo. También hay muchas formas de presencia además de la física y tangible. Para nosotros, cristianos, está la presencia de Jesús en la Eucaristía, pero también, como el mismo dijo, su presencia allí donde hay dos o tres reunidos en su nombre. Y su presencia en los pobres, los necesitados, los marginados, los enfermos.
EN FAMILIA:
OPCIÓN A
Enseñar a los niños a hacer un acróstico con la palabra ASCENSIÓN. Por ejemplo:
A = MISTAD
S = IMPATIA
C = OMPAÑERISMO
E =
N =
S =
I =
O =
N =
OPCIÓN B
Explicar las apariciones de la Virgen de Fátima.
http://dibujosparacatequesis.blogspot.com/2014/05/nuestra-senora-de-fatima.html