26 mar

Reflexión miércoles 26 de marzo

Lectura del santo evangelio según san Mateo (5,17-19):

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«No creáis que he venido a abolir la Ley y los Profetas: no he venido a abolir, sino a dar plenitud.
En verdad os digo que antes pasarán el cielo y la tierra que deje de cumplirse hasta la última letra o tilde de la ley.
El que se salte uno solo de los preceptos menos importantes y se lo enseñe así a los hombres será el menos importante en el reino de los cielos.
Pero quien los cumpla y enseñe será grande en el reino de los cielos».

Palabra del Señor

Reflexión

Algunos de los judíos contemporáneos de Jesús lo criticaban porque pensaban que había venido a rebajar la ley, que quería aguarla. Y el Señor nos enseña que en absoluto esa es su intención. Más bien, todo lo contrario. Ha venido para llevar a la ley a su plenitud. Esto significa, no quedarse únicamente en la letra de la ley sino entender la enseñanza que Dios nos quiere comunicar con ese precepto. Es más, anuncia que ese cumplimiento está garantizado. Jesús también nos enseña que hemos de prestar atención hasta a los mandamientos menos importantes o más insignificantes. No solo cumplirlos, sino además enseñarlos. El Señor quiere que vivamos con tensión nuestra relación con la ley, que no seamos conformistas ni pactemos con la ley de mínimos, sino que busquemos el cumplimiento en plenitud de la ley.

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