Maravillosa experiencia Erasmus+ de Ane Irigoyen en las islas de Madeira, Portugal.

Si tu también quieres tener una experiencia inolvidable como la de Ane, ¡ya puedes hacerlo! abierta la convocatoria para pedir tu plaza Erasmus desde tu intranet. Más información aquí.

“Hola, soy Ane Irigoyen estudiante de 3 de Enfermería y he estado de Erasmus+ en Madeira (Portugal). En este aspecto estoy muy agradecida a la gran acogida que tuve en las prácticas y en la universidad de destino, nos dejaron rotar por tres secciones del hospital, en mi caso tuve la oportunidad de pasar por UCI, Urgencias y hospitalización.

La idea de realizar un Erasmus había pasado varias veces por mi mente, pero el hecho de sentir que tenia poco nivel de inglés me echaba para atrás, ya que no es lo mismo tener un nivel básico para comunicarte en la calle (como cuando viajas al extranjero) que el hecho de tener contacto directo en un hospital con pacientes que precisan de tu ayuda.

He de decir que la primera vez que me hablaron de la isla de Madeira ni siquiera sabía de su existencia, pero nada más indagar un poco me di cuenta de que era allí donde debía estar. Para poneros en contexto, se trata de una isla pequeña que ofrece tanto mar como montaña, lo cual en conjunto forma paisajes increíbles con un clima envidiable.

El idioma al principio fue una gran barrera, pero poco a poco te vas haciendo al oído y la gente de allí te ayuda hablando despacio e incluso muchos acaban hablándote en español o traduciéndote las palabras. Sin duda si debo resaltar una característica de las personas que viven en Madeira es la paciencia, ya que al tratarse de una isla tan pequeña, sientes que todo es muy tranquilo, la gente siempre tiene ganas de ayudarte y lo hacen todo desde la calma.

Aun recuerdo el primer día cuando aterrizo mi avión, era la pista de aterrizaje más pequeña que había visto nunca, pero nada más ver la isla lo supe, era donde tenía que estar, el paisaje me enamoro desde el primer vistazo.

Dicen que todos los erasmus tienen diferentes perspectivas de aprendizaje dependiendo del destino, yo podría resumirlo en 1 palabra “familia”. Al tratarse Funchal de una ciudad tan pequeña, no tardamos nada en hacer amigos, de hecho, los demás erasmus nos estuvieron esperando para darnos la bienvenida y enseñarnos la isla, zonas de fiesta… Pero no solo ellos, los tutores de prácticas (porque allí te asignan un enfermero en cada sección del hospital al que vas) sentí que me trataron con mucha cercanía y no tarde en cogerles cariño a cada uno de ellos.

Lo mejor de la isla es que con un coche puedes ir a cualquier rincón, por lo que puedes acabar el mismo día en el norte de la isla sumergiéndote en la preciosa playa de Seixal, estar en el bosque de fanal con la niebla metiéndose en los árboles o simplemente dejándote llevar en busca de algún sitio tranquilo para ver un atardecer. Sea cual sea tu plan de día ideal, la isla te lo ofrece.

Si debo daros un consejo (en caso de que acabéis decidiendo ir a Madeira) os recomiendo sin duda que reservéis unos días para ir a Porto santo, una isla de 5.000 habitantes con unas playas paradisiacas de agua azul celeste y con dunas de arena interminable. Podéis ir en Ferry desde el puerto de Funchal y apenas se tardan 3h.

Sin duda para mi ha sido un aprendizaje tanto a nivel personal como profesional y estoy muy agradecida de haber tomado la decisión de ir, por lo que si aun estas dudando en si realizar un erasmus o no, te aconsejo que lo hagas, aunque pueda dar un poco de vértigo el no saber donde ni con quien vas a estar, de verdad vale la pena.”