Reflexión domingo 14 de mayo
Lectura del santo evangelio según san Juan (14,15-21):
EN aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«Si me amáis, guardaréis mis mandamientos. Y yo le pediré al Padre que os dé otro Paráclito, que esté siempre con vosotros, el Espíritu de la verdad. El mundo no puede recibirlo, porque. no lo ve ni lo conoce; vosotros, en cambio, lo conocéis, porque mora con vosotros y está en vosotros. No os dejaré huérfanos, volveré a vosotros. Dentro de poco el mundo no me verá, pero vosotros me veréis y viviréis, porque yo sigo viviendo. Entonces sabréis que yo estoy en mi Padre, y vosotros en mí y yo en vosotros. El que acepta mis mandamientos y los guarda, ese me ama; y el que me ama será amado por mi Padre, y yo también lo amaré y me manifestaré a él».
Palabra del Señor
Reflexión
Celebramos el sexto domingo de Pascua, la liturgia de la palabra nos anuncia de que pronto Jesús va a subir al padre.
Así lo vemos en el evangelio de Juan del día de hoy. En este evangelio vemos dos cosas la primera parte como Jesús les dice a los apóstoles que tienen que cumplir los mandamientos para querer mucho a Dios. Y la segunda parte, en el que les dice Jesús a los apóstoles que nunca estarán solos, que el Espíritu De Dios siempre estará con ellos y que nunca nos va a abandonar.
Y es verdad queridos hermanos, en los momentos alegres de nuestra vida no nos damos cuenta, pero en los momentos difíciles de nuestra vida nos damos cuenta de que Dios está con nosotros, por eso le rezamos, entonces es cuando surge la fe, surge el confiar en Dios.
Jesús quiere que le amemos guardando los mandamientos y viviendo conforme a su Espíritu, el mandamiento del amor, así nos lo dice el evangelio. Un amor que es generoso, caritativo y misericordioso. Dentro de este marco de la alegría de la Pascua, Jesús nos invita a llevar ese amor de Dios a los demás, pero sin olvidarnos de que para amar mucho a los demás, tenemos que amar mucho a Dios. Que le pidamos en este domingo a Jesús, que nosotros seamos capaces de ser portadores del amor de Dios a los demás.