La profesora de la Universidad Católica de Valencia Catalina Martín ha hecho unas declaraciones del mayor interés para Televisión Española. Sus palabras quedan reproducidas en el video que puede verse a continuación. En él se explica cómo el Santo Cáliz de la Última Cena salió de Jerusalén y tras ser depositado en varios lugares de la Corona de Aragón, quedó custodiado en la Catedral de Valencia, donde se conserva desde el siglo XV.

Por otra parte, la capilla donde preside el altar principal es de un estilo gótico esplendoroso, allí pueden los visitantes contemplarlo y los fieles recordar el momento que ha hecho que este objeto sea memorable: la Cena en la que el Señor instituyó el sacramento de la Eucaristía. Éste es el verdadero sentido de que la reliquia haya sido conservada más de dos milenios y todavía hoy emocione su contemplación.

Asimismo conviene no confundir el Santo Cáliz con el denominado Santo Grial, que de existir sería el recipiente en el que se recogió la sangre del costado de Cristo en la cruz, pero nunca se ha encontrado, de ahí toda la mitología que ha rodeado a este Grial, que no puede ser confundido con el Santo Cáliz de la Última Cena y mucho menos con los supuestos efectos que se le atribuían al mencionado Grial. El Santo Cáliz es una reliquia, un objeto para el culto, mientras que el Grial es una ensoñación.