Todo cantante o persona que inicia unos estudios de canto debería previamente pasar por una exploración otorrinolaringológica específica para descartar cualquier patología laríngea (congénita/adquirida), con lo que se evitarían muchos problemas futuros.

A la hora de diagnosticar y tratar correctamente la patología de la voz cantada es necesario tener cierta experiencia, ya que los problemas vocales del cantante deben contemplarse de una forma global, incluyendo en la anamnesis las circunstancias personales, más allá del puro motivo de consulta. En estos pacientes, pequeñas variaciones en los estados de salud vocal y de ánimo pueden influir de manera muy importante en su actividad profesional.

Habitualmente, el cantante consulta por problemas específicos, por ello debemos animarle a que se explique para intentar entender qué le pasa exactamente ya que suele tener un elevado nivel de ansiedad puesto que, al tener sintomatología “diferente” al resto de pacientes, siempre tienen miedo de no hacerse entender a priori.

Además de realizar una profunda anamnesis, debemos valorar la voz hablada como en el estudio normal de cualquier paciente con disfonía. Si oímos una voz hablada normal y refiere un problema en voz cantada, habrá que hacerle cantar.

Los principales síntomas vocales que podemos encontrar al valorar la voz cantada van a ser los siguientes:

• Síntomas de alteración en la cualidad vocal: frecuentemente relacionados con lesiones de masa.
• Síntomas de fatiga y esfuerzo: Suelen ir asociados a hiatos, disfonías por tensión muscular, defecto de cierre posterior.
• Síntomas de pérdida de extensión vocal: muy común en el cantante,  pueden estar relacionados con cuadros inflamatorios agudos, edema, uso excesivo de voz.
• Síntomas de descontrol en la frecuencia: pueden presentar quiebras de voz, falta de modulación, modulación excesiva, voz trémula. Pueden deberse a una mala técnica respiratoria, entre otras causas.
• Síntomas de descontrol de la intensidad de voz: interrupciones de voz con pérdida total de sonorización, dificultad en modular la intensidad de la voz, normalmente estos síntomas indican abuso vocal o fatiga.
• Síntomas de sensaciones desagradables en la emisión: dolor al hablar/cantar, dolor muscular en cintura escapular, ardor, sensación de cuerpo extraño, que indican tensión muscular o reflujo faringo-laríngeo (este último muy frecuente en el cantante lírico).

La exploración inicial en problemas de voz en el canto debe incluir, por supuesto, el índice de incapacidad vocal para el canto o S-VHI (Acta Otorrinolaringológica Española. Volume 61, Issue 4, July–August 2010)

Ídice de incapacidad vocal para el cantante (S-VHI), validado en español