Nuestra alumna Carla Barona, estudiante del Grado en Enfermería en la Universidad Católica de Valencia “San Vicente Mártir” nos cuenta su experiencia en Brujas (Bélgica), en

“Hola, soy Carla Barona, estudiante de enfermería de cuarto curso.

Hace un año, en enero del 2018, realicé mi primera movilidad erasmus en Finlandia. A raíz de ahí, mi vida dio un cambio de 180 grados. Casi tanto, que este año a última hora decidí realizar mi segunda experiencia erasmus. Esta vez en Brujas. No sabría realmente cómo empezar a contar esta corta pero preciosa experiencia. Creo que Bélgica es uno de los países más acogedores en los que he estado. Nada más llegar a Brujas ya estaba enamorada de esa pequeña ciudad que acabaría llamando hogar. Es difícil creer que a tanta distancia se pueda sentir una como en casa. Que en un país tan frío puedas sentirte acogida por la nieve, su encanto y su gente. Me ha encantado conocer cada uno de los rincones, poder recorrerlos en bici.

Realicé esta movilidad para hacer mis practicas allí, en un hospital muy grande y moderno y en el servicio que solicité, lo cual me encantó. Estuve durante tres meses en quirófano. No voy a negar que esta experiencia ha sido una de las cosas más agridulces que he vivido nunca. Estar en quirófano ha sido duro. Hay que saber muy bien adaptarte a su entorno, saber reaccionar rápido aún no hablando el mismo idioma. He tenido días en los que solo me hubiese gustado tirar la toalla y otros en los que me comía el mundo allí dentro.

Para mí, mi mayor barrera a pesar de ya haber realizado mis prácticas en otro país con otra lengua, ha sido el idioma. No todos lo enfermeros están gratos de recibir a estudiantes extranjeros y guiarles en situaciones tan complicadas. Sin embargo, he aprendido mucho, tanto personalmente como profesionalmente. He conocido a enfermeros y cirujanos maravillosos. Este año he cumplido cada unos de mis objetivos dentro de las prácticas los cuales estoy segura que me han hecho ser mejor enfermera y ahora estar mejor formada y cualificada para la vida laboral.

Dentro de lo personal, he crecido y ahora sé que soy capaz de afrontar momentos duros dentro de una vida laboral. También he aprendido a ser capaz de entender y comunicarme con las expresiones corporales. Sin duda alguna, volvería a vivir la misma experiencia, sin cambiar absolutamente nada. Creo que cada una de las cosas me han hecho ser quien soy ahora.

También creo que nunca podré olvidar Brujas y todo lo bueno que me ha hecho sentir. Cada una de las personas que he conocido que ahora son una parte de mi. Cada viaje que he realizado y cada cultura nueva aprendida.

Creo que la experiencia erasmus es algo que todo el mundo debería vivir aunque sea una vez en la vida porque, por mucho que la gente explique realmente lo que es, nunca lo sabrás hasta vivirlo tú. Ojalá pudiera seguir realizando erasmus. Hacer las prácticas en otros lugares del mundo hace que aprendas a niveles mucho más altos de lo que puedas aprender en tu propio país. Aprendes a fijarte hasta en los pequeños detalles, a ser más estricta contigo misma y a ajustar hasta los mínimos fallos.”

¡Carla, muchísimas gracias por tu experiencia, te deseamos lo mejor en el futuro!