EXPERIENCIA OUT – ELENA ROCHE
Elena Roche, estudiante de Enfermería en la Universidad Católica de Valencia ha realizado su movilidad internacional Erasmus Prácticas en Brujas, Bélgica. A continuación nos cuenta su experiencia:
¨El día que elegí irme de Erasmus no era realmente consciente de todas las cosas que eso iba a suponer. Entre todos los destinos que habían decidido Bélgica primeramente porque era la mejor opción que la Universidad ofrecía para los alumnos de 4º curso y confié en ello y segundo porque era un país al que nunca había viajado y siempre me había hablado muy bien de él.
Obviamente en toda decisión existen cosas buenas y malas que valorar; en este caso las “malas” para mí suponían el miedo a irme a otro país a vivir siendo la primera vez que iba a independizarme y separarme de mi familia y amigos durante tanto tiempo y además del idioma porque antes de venir no estaba segura si aquí iban a hablar francés, neerlandés o algún dialecto de este aún más difícil, o si la gente iba a saber comunicarse en inglés ya que es el idioma que la universidad nos pedía para poder venir.
Mi primer miedo de venir sola se redujo cuando supe que venia dos amigas mías de clase, Marina y Cris, me acompañarían para vivir juntas esta experiencia. Sobre el idioma aprendimos cuando llegamos que aquí en Brujas la gente suele hablar sobretodo neerlandés, aunque puedes encontrarte gente que hable francés (ya que aquí son esos los dos idiomas oficiales) así como que sepan más idiomas, sobretodo inglés (también encontrabas algunas personas que sabían español y eso te alegraba mucho).
Otra buena decisión que tomamos fue la de escoger vivir en una residencia de estudiantes, en este caso la que nos ofrecía la universidad, se llama B-KOT. La verdad que lo bueno de esta residencia no eran ni sus instalaciones ni sus servicios, como por ejemplo que podías encontrarte cosas que no estuvieran en su mejor estado o que el servicio de limpieza no lo hiciera lo mejor posible, además de que no hay lavadoras y teníamos que ir a lavanderías de la calle o bien en bus o bien en bici. Lo bueno de vivir en esta residencia es por una parte que estábamos a 3 minutos contados de la estación de tren y de buses lo que te permitía ir fácilmente a todos sitios y la gente que podías conocer aquí, tanto españoles como de otras nacionalidades. También es cierto que sacarte ticket de tren y/o bus no era muy barato, pero como casi todo en este país. Aunque muchas veces el mejor trasporte es la bici la cual puedes y como consejo debes alquilarte una bici por solo 6 euros al mes.
Viajar en bici por Brujas y alrededores nos ha permitido descubrir un sinfín de paisajes, bosques y sitios preciosos que te puedes encontrar en este país. También gracias a la facilidad de los buses y trenes, junto con la gente tan maravillosa que he conocido aquí pudimos viajar a algunas ciudades como Lille en Francia, Köln y Bonn en Alemania y muchas ciudades de Bélgica como Brussels, Gent, Antwerpen, Liège, Leuven, etc.
Por otra parte, he tenido mucha suerte con mis prácticas, ya que por la situación del Covid-19 pensaba que como por toda Europa estaban suspendiendo las prácticas nosotras íbamos a tener que parar las nuestras y volver a casa, pero esto no fue así, continuamos y acabamos nuestro periodo de prácticas tal y como estaba establecido y eso me hizo poder quedarme y seguir con mi Erasmus aunque no de la misma forma obviamente. Se establecieron medidas sanitarias, pero como aquí la gente es muy respetuosa y sigue las reglas no como en otros países, no hubo un confinamiento tan estricto ya que podías salir a correr, a tomar el aire o dar un paseo a pie o con la bici, esto hizo todo mucho más llevadero.
Mi período de prácticas se dividió en dos mini períodos, el primero lo pasé en el Hospital Sint-Jain, a 10 min en bus de casa, en la unidad de Cathlab, al principio iba con miedo ya que no sabia de lo que se trataba y nunca había estado en algo parecido, pero al terminarlo estaba muy contenta ya que aprendí mucho sobre cateterismos, técnicas de quirófano y esterilidad, entre muchas otras cosas. Además de que estuve muy cómoda allí y me trataron genial.
El segundo mini periodo fue en el hospital Az-Zeno, estaba un poco más lejos que el anterior, ya que no se ubicaba en Brujas, sino a media hora en bus o 20 min en tren, más otros 20 andando. A pesar de eso estuvo muy bien ya que eran unas instalaciones muy nuevas y la gente te trataba muy bien. Allí me tocó estar en pediatría y fue una pena porque es algo que a mi me gusta mucho y no pude aprender todo lo que hubiera sido posible si no se hubiera dado la situación del Covid-19, que hizo que no hubieran apenas niños, aunque lo que hacíamos era ir a otras unidades a ayudar y se agradecía mucho ya que echaba de menos el contacto con el paciente aunque a veces fuera un poco difícil por el idioma.
Estoy muy feliz por la experiencia que hemos vivido y la volvería a repetir una y mil veces más. Además agradezco muchísimo porque la coordinadora de nuestra universidad, Esther, como la de la universidad de aquí de Vives, Sonia, siempre han estado pendientes de ayudarnos en todo momento que lo necesitáramos. “
¡MUCHAS GRACIAS Elena, te deseamos todo lo mejor!
Has tenido una super experiencia, me ha gustado mucho leer como ha sido esta gran aventura. Un saludo.