Corrían los ochenta cuando Alaska nos entretenía a los más peques de la casa, con la Bruja Avería y su “Soy Avería y aspiro a una alcaldía”. Pues ahora más que entonces tiramos de Bola de Cristal para hacer augurios y premoniciones sobre pactos,
Rivera
Corrían los ochenta cuando Alaska nos entretenía a los más peques de la casa, con la Bruja Avería y su “Soy Avería y aspiro a una alcaldía”. Pues ahora más que entonces tiramos de Bola de Cristal para hacer augurios y premoniciones sobre pactos,