Título original: Mr. Holland’s Opus

Año:1995

Duración:142 min.

País: Estados Unidos Estados Unidos

Dirección: Stephen Herek

Guión: Patrick Sheane Duncan

Música: Michael Kamen

Fotografía: Oliver Wood

Reparto: Richard Dreyfuss, Glenne Headly, Olympia Dukakis, William H. Macy, Jay Thomas, Alicia Witt, Jean Louisa Kelly, Terrence Howard, Balthazar Getty

Productora: Polygram Filmed Entertainment, Interscope Communications, The Charlie Mopic Company

Género: Drama | Enseñanza. Discapacidad auditiva. Años 70. Colegios & Universida

Llega fin de curso. Tiempo de notas, revisiones, recuperaciones… Y el profesor parece que ocupa un papel importante en este trepidante final que nos acerca a las vacaciones de verano.

El tema de la educación (en el colegio o instituto; como drama, comedia o musical) es un tema recurrente en la historia del cine. No todas las películas son buenas, claro, pero hay algunas que, además de sacar sobresaliente en cine, han llegado a marcar a más de una generación de espectadores que en ellas vieron reflejadas sus propias experiencias escolares y vitales. Una de ellas es la que queremos comentar hoy: Profesor Holland (Stephen Herek, 1995).

Profesor Holland es una emotiva y memorable película que describe la vida del Sr. Holland, un brillante pianista cuyo objetivo era componer una gran obra con la que llegar a saborear el éxito. Ante las dificultades que esto comportaba, ha de ganarse la vida impartiendo clases de música en una escuela superior de Portland lo que, según su criterio, le permitiría tener tiempo para componer su sinfonía.

Pero; y la suya también

La acción transcurre en la sociedad americana de los años ’60, poco después del asesinato del presidente Kennedy y finaliza en los años ’90 cuando las autoridades educativas deciden recortar el presupuesto a la escuela. A lo largo de estos 30 años de entrega total a sus discípulos, a su familia (tiene un hijo sordo de nacimiento) y a su sueño (componer una sinfonía), el maestro descubre que enseñar no es sólo transmitir unos conocimientos, es mucho más (“Enseñar es aprender dos veces”).

Lo que Holland acaba logrando, más allá de enseñar a leer una partitura, es hacer de la vida de sus alumnos algo extraordinario y también la suya porque se da cuenta de que su “obra” más importante (el título original es Mr Holland’s Opus, ‘La obra de Mr. Holland’)

en realidad ha sido más humanista que musical, más vital que académica y, desde luego, más coral que instrumental.

Profesor Holland es una película que os animo a ver. Un film que transmite y hace reflexionar sobre temas como el valor de la familia, de la amistad, de la dignidad y de la trascendencia de la vida.

Dra. Mª José Salar.