A continuación, Alejandra Monserrat, alumna del grado de Psicología de la Universidad Católica de Valencia nos cuenta su experiencia en la Universidad de Wageningen situada en Holanda.

“Quiero presentar mi experiencia como una estudiante de Erasmus en el país de Holanda. Me llamo Alejandra Monserrat, alumna de 3º en Psicología y desde el momento que supe que me podía ir de Erasmus, siempre he sido una soñadora de poder llegar a vivirla.

Ciudad de Wageningen (Holanda).

La experiencia de Erasmus es algo inexplicable y a la vez alucinante, el Erasmus hay que vivirlo y experimentarlo para poder llegar a entenderlo en todos sus ámbitos. Estar lejos de casa te hace conocerte, superarte, crecer, valorar y sobretodo disfrutar y eso es algo esencial en cada uno de nosotros, solo hay que encontrarlo y darlo a conocer. Viviendo solo en un país tan diferente al que estás acostumbrado te hace ver las cosas de otra manera, se te vienen ideas a la mente que igual nunca hubieras podido llegar anteriormente, eres tú, únicamente tú el responsable de ti mismo. Aprendes que las tareas de casa igual no son tan fáciles como crees que son , tu eres la que te tienes que hacer la comida día tras día, eres tú la que tienes que lavarte la ropa y eres tú la única responsable de ti misma. Te abre los ojos, empiezas a ver las cosas de manera inversa y empiezas a valorar absolutamente todo, cosa que igual necesitas alejarte un poco de tu rutina para poder verlo. Por todo esto, el Erasmus te hace simplemente cambiar.

Ciudad de Wageningen.

Ahora ya en mi experiencia personal con el país y concretamente en mi cuidad, tiene cosas impresionantes, paisajes realmente emocionantes, ciudades enormes como la famosísima Amsterdam o Rotterdam y rincones muy acogedores como puede ser Giethoorn, Maastricht o Groningen. Pero no es solo lo que ves, Holanda es un país con muchísimas cosas, por no decir la mayoría, completamente diferentes. Sus costumbres a veces son bastante raras y complejas de entender, su forma de vida te va sorprendiendo cada vez más como por ejemplo puede ser el ir a todos lados en bici o conectar todo con la naturaleza y en conseguir un mundo más sostenible hasta llegar a conocer y entender la esencia holandesa ya que no es que sean muy parecidos a nosotros. Parece que todo es bonito, y lo es, pero también hay situaciones y momentos que no es tan bonitas, acostumbrarse al clima de los países nórdicos es un poco caótico, los españoles nos rodeamos la mayoría del año por nuestro querido sol y aquí pocas veces sale. Con esto, hay situaciones que se te hacen cuesta arriba simplemente de la falta de vitamina solar, cosa que no nos damos cuenta teniéndolo. La forma de vida es tranquila y a la vez agotadora pero siempre con ganas de aprovechar los días al máximo y experimentar la experiencia de tu vida.

Wageningen es una ciudad pequeña en comparación con muchas de las otras ciudades que encuentras en Holanda, situada al sureste del país. Básicamente la cuidad está basada en su universidad, ya que es una de las mejores del mundo y la mejor de Europa en el campo de las ciencias de la vida. Su campus es es inexplicable, sus edificios son enormes y las clases de más de 300 personas. En mi opinión, describiría su campus como un” mundo futurista” ya que su alto nivel de avance en todos los ámbitos y su alto nivel de formación, enseñanza y exigencia. La universidad de Wageningen conlleva mucho tiempo de estudio y dedicación a las asignaturas que cursas ya que el nivel de estudio es increíblemente alto y duro. Al transcurro del curso te vas saturando y te va costando todo demasiado hasta el punto de a veces querer tirar la toalla. Por eso, además de deciros todo lo positivo, quería deciros que la experiencia aquí también tiene mucha parte en el estudio, pero la formación y el aprendizaje de esta manera tan intensa, siempre te sorprenderá con resultados aún más positivos.

Dicho todo esto, siempre recordaré esta experiencia como algo inolvidable que me cambió mi vida. Creo que todos los estudiantes que tengan la oportunidad de vivir esta experiencia deberían abrazarla con todas sus ganas porque como ya he dicho, el Erasmus es algo que no se puede explicar, hay que vivirlo.”

Campus de la Universidad de Wageningen (Holanda).

¡Desde la Oficina Internacional te agradecemos mucho que hayas compartido con nosotros tu experiencia!