Miembro del grupo de Investigación Mitos fundacionales imparte una conferencia en la Universidad de Castilla La Mancha

El doctor Lucas Montojo Sánchez, miembro del grupo de investigación interuniversitario Mitos fundacionales y sus registros como generadores de identidades territoriales en el suelo hispánico: origen, sentido y evolución y profesor de historia en Institute of the International Education of Students (IES Abroad), impartió una conferencia el martes 17 de octubre en la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad de Castilla La Mancha.

La conferencia, titulada Mitos y realidades del desarrollo de la mujer peninsular en la Nueva España en los albores de la modernidad: análisis histórico de los perfiles jurídico y socioeconómico en la Ciudad de México, formó parte de las actividades que desde la Comisión Mujer y Ciencia se organizan cada curso académico.

Dicha comisión, establecida en 2005 y presidida por la doctora Cristina Escribano Gámir, profesora titular de la Universidad de Castilla La Mancha, busca evidenciar el no cumplimiento del artículo 14 de la Constitución española, en el que se proclama el derecho de igualdad y a la no discriminación por razón de sexo.

En dicha conferencia Montojo expuso los resultados de su tesis doctoral -defendida recientemente en la Universidad Católica de Valencia San Vicente Mártir-, resaltando la importancia capital que tuvo el traslado de mujeres a las Indias desde los primeros años tras el descubrimiento, “pues solo así fue posible la trasplantación de nuestra cultura y valores a los nuevos territorios y la implantación de una nueva sociedad a imagen de la española”. De igual manera, destacó el papel activo del sexo femenino en la conquista del Imperio Mexica, analizando las numerosas referencias que a ellas se hacen en las diferentes crónicas donde se destacan “las valerosas hazañas que muchas de estas mujeres realizaron; hazañas comparables a las de cualquier conquistador”.

Para el ponente el destacable papel de la mujer en la capital de la Nueva España es extrapolable a otros puntos del continente americano y meridianamente mayor al desarrollado por el grupo femenino en los reinos peninsulares.